10/8/07

Lecturas (1): Faulkner por Borges

Todo está callado, menos una pareja de grillos y un perro a lo lejos que cuelan sus rumores por la ventana abierta. En la habitación un tipo está tirado en la cama, de lado, con un pequeño lápiz en la mano que parece un cigarro en la últimas. Hay una lámpara encendida que alumbra un libro abierto posado sobre la sábana, el resto es penumbra. Lee una y otra vez el mismo párrafo, sabe dios porqué. Hay párrafos que hipnotizan. O no se entienden muy bien (y por eso mismo se atraganta el entendimiento), o nos llevan de la mano a ensoñaciones personales y apenas puede uno seguir leyendo y ya es como si tuviéramos un pie en otro mundo, que no en el otro mundo, uno a medio camino entre el sueño propio y el del autor.
"Durmieron en la galería en dos catres y luego, al amanecer, cuando empezó a hacer frío en uno, sus pies desnudos en las tablas, el duro hundirse de codo y cadera lo despertaron al meterse ella entre las sábanas oliendo a tocino y a bálsamo. Había sobre el lago una luz gris y cuando oyó al haragán, se dio cuenta exactamente de lo que era, hasta de lo que parecía, escuchando la voz ronca, pensando cómo sólo el hombre, entre todos los seres, atrofia deliberadamente sus sentidos naturales y eso a expensas de los demás sentidos, cómo el cuadrúpedo obtiene toda información por el olfato, por la vista y por el oído y desconfía de todo lo demás, mientras el bípedo sólo cree en lo que lee."

(Las palmeras salvajes, William Faulkner, traducción de Jorge Luis Borges, editorial Siruela, 2007, pág. 92).

Aquí el escritor, sudando tinta china ante su máquina de escribir...

7 comentarios:

Mabalot dijo...

Picoteo tanto últimamente que apenas leo, pero estos días estoy abducido por esas prosa brava adrede de Faulkner, traducida de Borges. Ya no sé de quien es el mérito.

Si tengo ocasión compartiré algunos párrafos de lo que vaya leyendo por aquí, este mes de descanso de uno mismo, que no de descanso laboral (me toca septiembre), y sobre todo de poca actividad en la Red...
Todo quisque al sol. Salud.

Sebastián Puig dijo...

Algunos estamos al pie del cañón, amigo. Y el texto es increíble, como bien tú dices. Imaginando el original, se me antoja sólo traducible por alguien como Borges. Un saludo.

Mabalot dijo...

Bueno rythmduel, encantado de tenerte por aquí. Si no hay nadie más, pues te pego recortes de lecturas para que les eches un vistazo tú. Eres un lector cojonudo. Un saludo.

Portarosa dijo...

Que sí, que sí que hay alguien más.

Faulkner por Borges... ¡pues sí que arriesgas! Uno de los mejores escritores de todos los tiempos traduce a otro de los mejores escritores de todos los tiempos: así cualquiera, hombre.

Un abrazo, Maba.

Mabalot dijo...

Pues no veas; Marías dice que esta traducción es malísima. Y tiene como proyecto/ sueño de traducción esta novela precisamente.

Y además nosotros, Porto, no nos dejamos llevar (mucho) por lo que tiene que ser, son, los mejores escritores de nuestro tiempo, que dijo quien fuera o la costumbre o los manuales de literatura; prefiero leer a Faulkner sin pensar en que para algunos es uno de los mejores etc... Se saborea mucho más así. Y además no quiero creerme una de esas afirmaciones hasta que lo confirma uno mismo.

Un abrazo.

Portarosa dijo...

De acuerdo.

Pero es que yo lo he confirmado :D

No, en serio, lo que he confirmado, dado que la comparación exacta con todos es imposible, es que ambos son absolutamente geniales; que ambos representan para mí, como pocos, lo que es un gran escritor, lo que es la Literatura como Arte al alcance de unos elegidos. Eso sí.

Un abrazo.

Mabalot dijo...

A Faulkner no lo he leído tanto. Parece el típico escritor que, o te encanta, o no lo tragas. A mí me interesa ahora un poco, pero tampoco ha sido uno de mis santos: por supùesto, es incapacidad mía como lector. Tampoco se puede adorar todo, ni siquiera todo lo que supuestamente es adorable y santo en esto de la literatura. No pasa nada. Yo lo estoy disfrutando este libro, y a mí eso me basta; cuando lo acabe quizá siga probando y a lo mejor acabo descubriendo a estas alturas a ese autor.
A Borges lo leí todo, o casi todo, nunca se puede decir todo, que hay cosas que estarán por ahí, fuera de sus obra completas. Y sí, el argentino es el escritor en castellano del S.XX.
Te puede gustar o no Cortazar, Rulfo o García Márquez, pero Borges está por encima del bien y del mal.

Un abrazo, Porto.