20/2/07

Soy un pobre enfermo


"Soy un pobre enfermo que vive gozando de salud. Creo en los médicos, pero no los llamo. Un vez, hace más de veinte años, me vio el doctor Marañón y me dijo que tenía un hígado silencioso, de los que matan sin avisar, y desde entonces le he visto sólo como amigo, pero no como médico."

Uno de los capítulos de su Nuevas páginas de mi vida (segunda parte de Automoribundia) está dedicado a sus tribulaciones de sano enfermo y a sus medicamentos. Ramón creía a pies juntillas en la frase de Hipócrates; "Quienes no sienten que una grave enfermedad les aqueja están mentalmente enfermos."

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Para mí ese señor con pipa ha representado siempre la literatura in person... Era un hipocondríaco de cojones.
Conde-Duque.

Anónimo dijo...

Hubo una época en que quería ser Ramón; y lo que es peor, pretendía escribir así, con lo que me salían unos cocidos de plomo francamente indigeribles. Tanto ingenio seguido mata hasta las cucarachas, sobre todo si no eres Ramón. Como dijo Felipe González del antiamericanismo, fue un pecado de juventud, del que creo haberme recuperado.
Ramón solo hay uno, y a mi me sigue gustando, pero poco a poco.
Su hipocondría era muy graciosa.