Veo desánimo por todas partes. Adiós literatura, adiós posteridad, adiós arte, adiós ríos. Aquí dejo unos cuantos recortes para reflexionar, si cabe.
Del artículo de Javier Marías de ayer sobre la muerte de la posteridad:
"¿Quién ve hoy el cine de Bergman, Rossellini o Renoir, amén de unos cuantos cinéfilos que compramos religiosamente sus DVDs? ¿Y quién lee al gran Faulkner o a Fitzgerald o a Céline? En el fondo somos tan frikis como los de La guerra de las galaxias o El Señor de los Anillos, sólo que sin disfraces ni convenciones. Esos autores ya no forman parte de la "cultura general", sólo de la de especialistas o marginales."
Según Marías es el fin de la literatura en el mercado, ya conquistada por el best seller e incapaz de sobrevivir al ritmo vertiginoso con el que se ventilan las novedades. Tres años encerrado en casa escribiendo su tomazo para que después le dure el libro dos meses como mucho en la mesa de novedades.
Suso de Toro también es pesimista. El sábado escribió un artículo en El País (Qué va a ser del escritor), en el que lamenta, o expone al menos, el fin del autor, además del lector de siempre, a costa del nacimiento de otra cosa, de otro tipo de autor, de otro tipo de lector, de un engendro por ahora incomprensible.
"El sistema de adelanto de derechos por su obra al autor permitió la profesionalización de los escritores. Quizá el sistema haya fracasado, desde luego está en crisis total. Hoy no existen los instrumentos para que la literatura de autor llegue a un público posible, pero puede ser que ya haya pasado el tiempo del autor tal como ha llegado hasta aquí. Estamos en un momento de crisis entre el papel y la Red; nace algo nuevo y muere algo viejo; quizá esté muriendo el autor literario y lo que lo rodea. Y el lector literario también. Habrá literatura como la hubo antes de la imprenta, pero la figura de autor será otra. Aún no sabemos cuál."
Ayer, además, me encontré este artículo de Alberto Olmos en su blog. A diferencia de Marías y Suso de Toro Olmos es un escritor joven. La posteridad de Olmos será poder vivir algún día de lo que venden sus libros, o al menos de juntar palabras en alguna parte. Ha publicado varias novelas pero eso no le dará para vivir, supongo. Javier Marías y Suso de Toro viven, que yo sepa, de lo que venden sus libros, pero sobre todo de lo que ganan con los artículos. En todo caso lo que habrán ganado con las ventas no será del todo despreciable, sobre todo Marías. La queja, un poco de los tres artículos, es la siguiente; el marketing, indisociable de la literatura en los últimos tiempos, ha acabado por abarcarlo todo, y ya no hay nada debajo, ni detrás, nada oculto bajo la máscara comercial que sea literatura. La literatura ya no existe, o tiene los días contados.
"Casi todos los escritores jóvenes lo han entendido ya. Se ha terminado la literatura de escribir, ahora empieza la literatura de ser escritor. Ocúpate primero de ser escritor, que ya habrá tiempo luego de escribir. A fin de cuentas, somos escritores para los que compran libros, no para los que los leen y lo importante es entender que los libros se compran antes de haberlos leído, por lo que ese campamento base comercial es en realidad nuestra meta.
Hace unos meses, un personaje del mundillo literario me arrojó este reto a la cara: A ver dónde estás tú dentro de veinte años y a ver dónde estoy yo. Mi respuesta fue: Yo no voy a estar.
Porque si esto no es el fin, se le parece bastante."
3 comentarios:
Yo creo que la situación se ha ido degradando cada vez más y al final va a reventar. El márketing se ha ido apoderando de todo y está desalojando a la verdadera literatura. Lo que me hace gracia es que esa gente que ha llegado subida en la cresta de la ola, y de los adelantos, y de las componendas, se halle ahora alarmada porque la ola va a pasarles por encima, porque hay tipos más fotogénicos, más mediáticos, más "rompedores" que ellos. Siempre habrá alguien más guapo que uno.
Pero quizás todo esto sea bueno para la literatura. La literatura nunca morirá, pero cuando su espacio lo han ocupado los que compran libros y no los que los leen, los que posan como escritores y no los que escriben, los que quieren vender treinta o cuarenta ediciones y no hacer buenos libros, es natural que la buena literatura (que para mí es la literatura sincera y auténtica, independientemente de su género) pase a un segundo plano. Que les deje el campo libre.
Por supuesto que la cosa está cambiando. Cada vez más, los cuatro o cinco chalados que hacen blogs escriben mejor que los escritores "profesionales", y un día quizás se los lleven por delante.
La literatura es lo que permanece. Cualquier cosa que por escrito permanece en el tiempo, en el recuerdo. Da igual el género. La literatura es lo que alguien escribe a los seres humanos del futuro. Todo lo demás es entretenimiento.
Los blogs también son entretenimiento. Presente absoluto; muy poca literatura, como en las mesas de novedades. Por supuesto hay más honestidad y arte en algunos blogs que en los libros de "esos" profesionales. Precisamente la riqueza de los blogs esté en que no los escriban "profesionales". Todo lo bueno de ellos está en eso, yo creo.
No no es posible que a los que en su dia vieron una revolución cinefila les llame usted Sr. Marias FFrikis,o a los que leimos el Señor de los anillos, y tb leimos a bergman que es un peñazo ya infumable pero hace años era signo de ser intelectual. Cuanto mas oscura mas silencio, una mujer mirando por una ventana mientras llueve eso era el sumum, no, no señor Marias yo he visto todas esas péliculas de autor, y descubrí muchas cosas con La Guerra de las Galaxias, y no soy friki, es más de la mezcla de ambas salen gente muy interesante pero friki i gual usted con su soporifera novela que tb leí pero es inaguaantable y ahora justo me topo con usted, que será un friki de esa exquisitez que usted cree transmmitir.
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